1. Precaliente el horno a 375ºF. En un recipiente redondo mezcle el agua templada, el azúcar y la levadura.
2. Deje reposar la mezcla por 5 minutos.
3. Añada el aceite, la harina, la sal y mezcle hasta lograr una masa.
4. Amase la masa añadiéndole harina si es necesario para evitar que se ponga pegajosa. Amase por 5 minutos.
5. Coloque la masa dentro de un recipiente redondo aceitado, volteando la masa para cubrirla de aceite por todas partes.
6. Cubra la masa con una toalla húmeda y colóquela en un entorno cálido unos 30 a 45 minutos para que la masa se levante y duplique su tamaño.
7. Retire la masa del recipiente redondo y divídala en dos porciones.
8. Extienda cada porción usando un rodillo para lograr un rectángulo que mida 14X10 pulgadas.

Para preparar el relleno:

1. En un recipiente redondo mezcle la mantequilla, los azúcares, la harina y canela. Coloque esta mezcla sobre cada uno de los rectángulos de masa.
2. Enrolle los rectángulos de masa a lo largo sellando los extremos y corte en secciones de 1 y 1/2 pulgadas.
3. Coloque las secciones sobre una lámina para hornear forrada de papel pergamino a 1/2 pulgada de distancia cada una, y cúbralas con una toalla húmeda dejándolas reposar unos 30 minutos en un entorno cálido para que se levanten.
4. Hornee en el horno precalentado unos 22 a 27 minutos, o hasta que queden doradas.
5. Deje que se enfríen antes de untarles el glaseado.

Para preparar el glaseado:

1. Usando una mezcladora, mezcle el queso crema, el yogur y el azúcar hasta quedar cremoso.
2. Unte el glaseado sobre los panecillos de canela y sírvalos.