9 oz (aproximadamente 4 tazas compactas) de espinaca fresca picada
1 taza de mozzarella rallada
1/2 taza de queso parmesano rallado
1/4 cucharadita de nuez moscada (opcional)
16 discos de masa hojaldrada para empanadas
Agua para sellar los bordes
Preparación:
Calienta una sartén a fuego medio-bajo. Añade 1 cucharada de mantequilla y la cebolla en rodajas. Cocina revolviendo de vez en cuando hasta que estén doradas y caramelizadas.
Añade 1 cucharada de mantequilla a la sartén con las cebollas. Incorpora la harina y cocina por 1 a 2 minutos hasta que esté ligeramente dorada.
Vierte lentamente la leche mientras revuelves constantemente con una espátula o batidor. Continúa revolviendo hasta que la salsa espese aproximadamente 3-5 minutos. Si la salsa queda demasiado espesa, añade un poco de leche para ajustar la consistencia.
Sazona la salsa con sal, ajo en polvo, nuez moscada y jengibre molido. Revuelve hasta que los condimentos estén completamente incorporados.
Agrega la espinaca picada y cocina por 2-3 minutos hasta que se ablande.
Mezcla el queso parmesano y la mozzarella hasta que se derritan por completo creando una salsa suave y cremosa.
Retira el relleno del fuego y llévalo al refrigerador. Enfría por al menos 30 minutos.
Precalienta el horno a 400°F
Coloca un disco de masa para empanadas sobre una tabla de cortar. Si es necesario, estira suavemente cada disco un poco.
Humedece ligeramente los bordes de cada disco de masa con agua mojando tu dedo en agua y luego pasándolo por el borde del disco.
Coloca 1 cucharada del relleno frío en el centro. Usar solo 1 cucharada de relleno, evita sobrecargarlas, lo que puede hacer que las empanadas se revienten en el horno.
Presiona los bordes juntos para sellar la empanada. Pellizca pequeños pliegues o presiona con un tenedor para sellar el relleno antes de hornear.
Una vez que la empanada esté lista, colócala en una bandeja engrasada para hornear. Prepara las empanadas restantes, espaciándolas 1 pulgada (2,5 cm) entre sí.
Pinta ligeramente las empanadas con aceite de oliva y hornea a 400°F durante 15-20 minutos o hasta que la masa esté hojaldrada y dorada.
Deja que las empanadas se enfríen durante 5-10 minutos después de sacarlas del horno antes de servirlas.
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