1. Comienza cortando la fruta de mamey, debes cortarla de la misma manera que lo harías con un aguacate. Deseche la semilla y la piel. Si usa pulpa de mamey congelada, córtela en cubos para llevarla a la licuadora.
2. Coloque todos los ingredientes en una licuadora y mezcle hasta que quede suave. Si lo quieres más dulce, agrega más leche condensada azucarada o azúcar.

Notas: Puede encontrar la pulpa de mamey congelada o fruta fresca en su bodega hispana favorita o en el pasillo hispano de su supermercado local.