7 Consejos para disfrutar los productos lácteos para aquellos con intolerancia a la lactosa

De acuerdo con un estudio científico, la tasa actual de intolerancia a la lactosa es del 12% en los EE.UU. La intolerancia a la lactosa es menos común en la población minoritaria y en los niños pequeños que en los adultos.. Y los estudios científicos demuestran que hasta las personas que tienen dificultad en digerir la lactosa, normalmente pueden disfrutar del consumo de productos lácteos.
Es importante saber por qué muchos expertos en salud están de acuerdo en que la leche y los productos lácteos forman parte importante de una dieta sana al contar con los nutrientes claves que todos necesitamos – hasta las personas que no toleran la lactosa. Aquellas personas que deciden limitar sus dietas antes de estudiar bien la información podrían más bien estar atentando contra su salud.
Aquí ofrecemos 7 consejos para incluir los nutritivos productos lácteos en tu dieta.
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- ¡Tómala! La leche sin lactosa es leche normal, pero sin el azúcar (la lactosa) que ha sido separado. Todos pueden disfrutar tomando leche sin lactosa porque cuenta con el mismo paquete de trece nutrientes esenciales que contiene la leche normal. Busca opciones de leche de grasa reducida, o de chocolate también baja en grasa que vienen en varios tamaños y están al alcance en tu supermercado más cercano.
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- ¡Combínala! Añádale pequeñas cantidades de leche, queso y yogur a tu dieta cotidiana. La comida sólida disminuye la rapidez de la digestión y permite que el cuerpo cuente con más tiempo para digerir la lactosa, lo que ayuda a prevenir los síntomas de intolerancia.
- ¡Rebánalo! Cuando se elabora el queso de la leche, se le quita casi toda la lactosa. Los quesos añejos, como el Cheddar, Colby, Monterey Jack, Suizo y Parmesano son todos naturalmente bajos en lactosa.
- ¡Úntalo! Busca alimentos como el yogur de cultivo vivo y activo. Esos productos contienen bacterias “buenas” que ayudarán a tu cuerpo a digerir más fácilmente la lactosa.
- ¡Mídelo! Comienza por agregarle pequeñas cantidades de leche, queso y yogur a los otros alimentos que consumes. Poco a poco, aumenta la cantidad de productos lácteos que consumes diariamente a medida que pasa el tiempo.
- ¡Sustitúyelo! Quizás estos consejos no sean para todos. Antes de realizar cambios, ten en cuenta que la intolerancia a la lactosa es una condición muy particular. Muchas personas que son intolerantes a la lactosa todavía pueden consumir productos lácteos en distintas cantidades y formas. Sigue los consejos de tu médico o consulta con un especialista en nutrición para obtener información adicional.
- ¡Saboréalo! Existen personas que piensan que los alimentos lácteos sin lactosa saben igual que las opciones normales, mientras que existen otras personas que dicen que en realidad estos últimos tienen un sabor más dulce. La dulzura adicional es el resultado del proceso de neutralización de la lactosa. Los estudios han demostrado que las personas prefieren la leche sin lactosa a las alternativas no lácteas. Al hacer uso de estas estrategias sencillas, la mayoría de las personas que son intolerantes a la lactosa pueden seguir disfrutando de los productos lácteos a diario.